El pasado mes de mayo, se “celebró” el Día Mundial de la Fibromialgia, enfermedad que provoca dolor constante en todo el cuerpo acompañado de alteraciones del sueño, fatiga, depresión y ansiedad. Es preocupante porque cada vez se reportan más casos de fibromialgia y, de hecho, según la OMS es un problema de salud pública que afecta a un 6,3 % de personas en el mundo, principalmente a mujeres.
El día internacional de la Fibromialgia se “celebra” el 12 de mayo desde 1993 con el objetivo de informar y sensibilizar a la población sobre este mal de difícil diagnóstico y tratamiento.
Un paciente con fibromialgia consulta en promedio con 7 médicos y tarda aproximadamente 4 años en ser diagnosticado. Esto ocurre porque muchos pacientes retrasan su visita al doctor por creer que su dolor desaparecerá por sí solo o porque no saben cómo describir con exactitud los síntomas que padecen.
Las personas con Fibromialgia viven la doblemente difícil situación de tener dolor y fatiga constante y de no ser comprendidas ni por su familia y muchas veces ni por su médico. La Fibromialgia es un síndrome clínico, es decir, un conjunto de signos aparentemente sin relación entre sí. El gran problema de la Fibromialgia es que, pese a que muchas personas la padecen, se sabe poco de ella.
El panorama empeora porque al no conocerse sus causas, no se atiende la enfermedad de raíz sino sólo sus manifestaciones, sus síntomas. El reumatólogo, neurólogo o psiquiatra -que son los médicos con los que suelen acudir los pacientes con este mal, debido a su parecido con enfermedades de dichas especialidades- prescriben tratamientos como analgésicos, antidepresivos, relajantes musculares, inductores del sueño que no curaran la enfermedad y que tienen efectos secundarios.
¿Qué hacer? Algunas medicinas alternativas presentan el siguiente planteamiento: que la causa de la Fibromialgia, al igual que de otras enfermedades modernas, es un desequilibrio en el campo electromagnético del cuerpo humano, por lo que pueden ser tratadas con terapias que actúen sobre éste como por ejemplo los Pares Biomagnéticos y, principalmente, con una alimentación adecuada.
El cuerpo humano funciona con impulsos eléctricos. Nuestro corazón, nuestro hígado, todos nuestros órganos funcionan gracias a las señales eléctricas que nuestro cerebro emite a través de las neuronas. Un entorno ligeramente alcalino es lo que nuestro cuerpo necesita para tener la bioconductividad adecuada para la salud y la vida. Esta alcalinidad y conductividad electromagnética dependen de los nutrientes (minerales y oligoelementos) de los alimentos que consumimos.
Al ingerir alimentos como lácteos que propician la acidez del cuerpo, o al tomar agua carente de minerales, disminuye la producción de aminoácidos que funcionan como neurotransmisores, y el cuerpo pierde bioconductividad. Entonces los órganos tienen que hacer un esfuerzo extra para funcionar y de hecho el cuerpo realiza funciones metabólicas que normalmente sólo hace en caso de desgaste extremo lo que genera el malestar general. Por su parte, el cerebro tiene un mayor consumo de glucosa y como consecuencia se experimenta cansancio, dolor y ansiedad.
Entonces para evitar y hasta sanar la Fibromialgia, algunas medidas básicas serían evitar alimentos ácidos, consumir suero oral en lugar de agua sola e ingerir algas marinas como espirulina o kelp que son ricas en oligoelementos.
En futuras colaboraciones seguiremos hablando de cómo afecta a nuestra salud el desequilibrio en nuestro campo electromagnético.
Por: Grupo de Especialistas Biaani
Oferta Especial Para Nuevos Visitantes
Al registrarte, obtén $400 de descuento en tu Test Epigenético al comprar en los próximos 3 días